¿Qué clavos usar para evitar la corrosión?

La corrosión en los clavos es uno de los problemas más importantes para cualquier obra o estructura de la que formen parte. Dicha corrosión afecta al estado en el que se encuentra el clavo y, por lo mismo, a la función que tiene en toda la estructura. Es por ello que debe evitarse de forma preventiva y, si ha aparecido, intentar solucionarlo en la medida de lo posible. Como empresa especialista en herramientas y consumibles, Corgrap quiere ofrecerle algunos consejos sobre cómo evitar la corrosión de los clavos y cómo elegirlos para evitar su corrosión.

¿Qué clavos usar para evitar la corrosión?

¿Qué es la corrosión de los clavos?

La corrosión de los clavos es el fruto de un proceso químico en el que hay una reacción entre el hierro y el oxígeno. Este proceso da lugar al óxido de hierro, que es propiamente la corrosión o su apariencia. En este proceso los átomos del hierro transmiten parte de sus electrones al oxígeno, que es un elemento con gran capacidad para atraerlos. De esa manera, es el elemento que los cede el que se oxida: el hierro en nuestro caso. El proceso de corrosión de los clavos puede variar en función de diferentes circunstancias. Por ejemplo, la presencia de humedad y sal puede acelerarlo, ya que esta actúa como catalizador – además de la propia agua –.

Por ello, la corrosión en clavos es más rápida y recurrente en zonas costeras. El proceso de corrosión en clavos no es exclusivo de aquellos hechos de hierro: la oxidación también se produce en el cobre, que es de hecho el que le da la apariencia verdosa. Sin ir más lejos, este efecto puede verse en monumentos famosos como la Estatua de la Libertad, que originalmente tenía un tono distinto al característico verde que tiene actualmente.

¿Qué clavos usar para evitar la corrosión?

¿Es posible eliminar la corrosión de los clavos?

Antes de hablar de cuáles son los mejores clavos para evitar la corrosión debe mencionarse que es posible eliminar la que ya ha aparecido. En efecto, es posible solucionarla mediante varios métodos naturales. El primero de ellos es aplicando vinagre. El ácido acético y el cítrico pueden ayudar a eliminar el óxido de forma eficaz y basta con un pequeño aplique para tener buenos resultados.

Aunque, si vas a instalar clavos en exteriores o zonas que son propensas a la oxidación de los materiales, nuestro consejo siempre es utilizar clavos específicos para evitar la corrosión.

Clavos específicos para evitar la corrosión

Hasta ahora se ha hablado de las formas de prevenir la oxidación de los clavos. Sin embargo, la forma más efectiva y la más cómoda es emplear clavos que no se corroan. Para ello, es preferible escoger modelos que, por su material, resistan bien este fenómeno químico. Hay que añadir que esta es también la forma más cómoda de evitar la corrosión en los clavos, ya que al emplear clavos que no se corroen tampoco tendrá que preocuparse de su mantenimiento o de tareas preventivas.

Clavo en bobina de acero FAP (unión plástico)

1.- Clavos de acero inoxidable

Sin lugar a dudas, la mejor alternativa al hierro es el acero inoxidable. El acero en general se trata de un material muy resistente que al ser una aleación es mucho más resistente a la corrosión. Concretamente, en el caso del acero inoxidable su resistencia a dicho proceso químico está asegurada. La razón es la composición de este tipo de clavos. Disponen de una proporción de 11% de cromo, por lo que alrededor del clavo se forma una película que evita la oxidación y está compuesta de óxido de cromo. En muchas ocasiones, también dispone de níquel, que de hecho lo hace más resistente a la oxidación. Una buena alternativa de clavos de acero son los clavos en bobina FAP.

Clavo Granel Ø 2,1

2.- Acero contra la intemperie

Este tipo de acero tiene una composición que ronda el 21% de otros elementos como el fósforo, níquel, cobre o cromo. Esto hace de él una aleación con una capa de protección contra el óxido que, por lo mismo, puede resistir mucho tiempo sin sufrir sus consecuencias. Además, hay que decir que este tipo de acero generalmente es más barato que el acero inoxidable.

Clavo en bobina electrosoldado Ø 3,8

3.- Clavos de hierro galvanizado

En el caso de que se quiera emplear hierro, es preferible que sea hierro galvanizado. Este es un tipo de hierro que resiste mejor a la oxidación. El proceso de galvanización consiste en poner una capa de recubrimiento de zinc al hierro. De esa manera, el zinc evita que entren sustancias que corroan el metal. Igualmente, otro de los puntos interesantes de este tipo de elementos es que es el zinc el que se oxida en lugar del hierro. También supone una alternativa muy barata y que puede obtener los mismos resultados a la hora de proteger este tipo de consumibles de la corrosión.

Clavos de aluminio inoxidable

4.- Clavos de aluminio inoxidable

Para evitar la corrosión de los clavos otra de las alternativas es emplear aluminio. Además de por su ligereza, el aluminio destaca también por no oxidarse. Esto se debe a que es un metal recubierto de aluminio, una capa que lo recubre y que impide también su oxidación.

¿Qué clavos usar para evitar la corrosión?

Mantenimiento para evitar o retardar la corrosión de los clavos

Existen varios puntos a tener en cuenta para evitar la corrosión de los clavos. El primero de ellos es mantener las superficies metálicas secas. A pesar de que existan materiales que no se corroen rápidamente, es recomendable mantener las superficies secas para que el agua no acelere el proceso y actúe como catalizador. Para ello también debe evitarse que se acumule o estanque en cualquier punto.

Otra opción interesante consiste en emplear recubrimientos de grasa. Tal y como se ha mencionado, este tipo de recubrimientos son efectivos porque repelen el agua. De esa manera, se evita que entre en contacto con el metal y pueda deteriorarlo mediante la corrosión. Existen sprays específicos, aunque cualquier grasa puede actuar para lograr este fin.

En este mismo sentido, pueden emplearse también pinturas especiales que están fabricadas a base de aceites. De esa manera, cumplen con una función parecida a la de la grasa en general y evitan que el agua y el oxígeno puedan actuar directamente sobre la superficie del metal.

De cualquier manera, siempre es recomendable contar con un servicio especializado a la hora de comprar clavos específicos para evitar la corrosión. Corgrap es una empresa especializada con años de experiencia que puede ayudarte a conseguir los mejores resultados en cualquier superficie. Puede consultar nuestro catálogo para encontrar toda clase de herramientas (clavadoras y grapadoras, entre otras) así como todo tipo de consumibles para cualquiera de sus trabajos. Entre ellos, clavos por aplicaciones y, naturalmente, clavos de diferentes materiales indicados para evitar la corrosión y el efecto del oxígeno y el agua sobre las superficies metálicas.

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